¡¡¡"Sentir
es Vivir"!!!
Existe
una diferencia considerable entre; “Pensar la Vida” y “Sentir
la Vida”.
“Pensar
la Vida” y “Sentir la Vida” Son dos formas
muy distintas de educar nuestro cerebro para afrontar, con más
o menos plenitud, nuestra experiencia de vivir.
En "Pensar
la Vida" pensamos las distintas experiencias de la vida, también
lo que sentimos, e intentamos describirlo todo con
palabras y conceptos, para poder comunicar nuestro mundo de experiencias.
Pero, una sensación,
si de verdad queremos comunicarla, no podemos describirla, tenemos
que expresarla.
Si aprendemos
a "Sentir la Vida", aprendemos a expresar y a comunicar
todo nuestro mundo interior, tanto a los demás como a nosotros
mismos.
Aprender a sentir
la vida comporta pues un cambio en las estrategias de aprendizaje.
Este cambio se produce al desarrollar nuestro cerebro de forma holística,
lo cual nos permite utilizar nuevos recursos de nuestra mente y elaborar
mejores estrategias en la elaboración del conocimiento, consiguiendo
con ello un potencial que nos va a llevar a una mayor excelencia intelectual
y creativa.
Para conseguir
este desarrollo sensológico, he establecido distintos niveles
de conocimiento que se van desarrollando a través de una serie
de experiencias y juegos (“sensojuegos”) que permiten
a cada uno, por sí mismo, constatar con la experiencia las
diferentes propuestas que va vivenciando.
De lo que pensamos
podemos establecer teorías y discusiones sin fin. Porque, el
pensar, en el fondo, no es más que una descripción de
la realidad. Pero el sentir, la experiencia viva del sentir, sólo
puede ser transmitido a través de otra sensación porque
es indescriptible.
Haciendo un símil
diremos que: “pensar es a la receta de cocina, como sentir es
a degustar el plato”. Las recetas de cocina no nos quitan el
hambre aunque nos hagan soñar en el deleite de comer, es solamente
la descripción del plato. Pero comer el plato de comida nos
dará nueva vida y hará gozar nuestros sentidos, aunque,
al principio, no sepamos cómo está hecho.
¿QUÉ
SUCEDE CUANDO SE TE ACABAN LAS PALABRAS?
Se suele creer
que las palabras lo son todo en la comunicación o que, como
máximo, pueden ser substituidas por imágenes que puedan
leerse como si fueran palabras.
El ser humano
necesita entenderse a si mismo y a los demás y, evidentemente,
las palabras son un buen invento, un gran medio para conseguirlo,
pero se ha ponderado demasiado la necesidad de la comunicación
verbal y olvidado que existen otras formas de percepción y
expresión cuya importancia no debe desdeñarse.
¿Qué
sucede cuando se te acaban las palabras al pretender explicar estados
de alma o de mente; percepciones de cosas que pasan dentro de ti,
sensaciones nexplicables con palabras de tu relación con los
demás o cuando intentas explicar las infinitas sensaciones
que te proporciona el entorno?
Pues sucede que,
al querer expresar sentimientos y sensaciones, muchas veces, puedes
encontrarte sin medios para comunicarte porque las palabras no te
sirven.
Tal vez, otras
veces, debas recurrir a la mística o a la religión para
intentar explicarte cosas que pasan dentro de ti que no puedes comprender
con la razón.
Y quizás,
en otras ocasiones, debas ir al psicólogo o al psiquiatra para
que busque en tu interior sensaciones que te distorsionan la vida.
Entonces percibes
lo inaccesible que eres aun para ti mismo. Descubres que una parte
muy importante de ti no sabes como utilizarla. Una parte tan importante,
que es la que dirige tus acciones y condiciona tus palabras y que
puede darte la paz, el equilibrio y la creatividad que necesitas para
poder ser feliz en esta vida
Las palabras no
lo explican todo, máxime son la referencia de unos códigos
que se han establecido para decir o decirte que has tenido una vivencia
determinada. Pero la vivencia, las sensaciones que te ha proporcionado
la vivencia, no puedes expresarlas con palabras pues, sólo
si consigues transmitir las sensaciones mismas de dicha vivencia de
forma que tu interlocutor pueda sentirlas, podrás decir que
te has comunicado.
TU
VIDA ESTÁ REGIDA POR SENSACIONES
Tu vida está
regida por sensaciones, pues incluso las ideas, las palabras y los
pensamientos están ahí, porque un enorme y complejo
entramado de sensaciones las está, continuamente, estimulando
y dirigiendo.
El artífice
de organizar estas sensaciones es una gran inteligencia que todos
poseemos pero que casi no usamos: La Inteligencia Sensológica.
LA
INTELIGENCIA SENSOLÓGICA
Cuando se hace
la luz en tu mente, es consecuencia de una serie de procesos físicos
y químicos que, interrelacionados, te dan una imagen, una palabra
o una sensación.
La Inteligencia
Sensológica y la inteligencia en general, son algo virtual
que a través de tus medios físicos, las interrelaciones
entre ellos y los archivos de datos que has creado, te proporcionan
la ilusión de un mundo de imágenes, sensaciones y palabras.
A través
de tus sentidos percibes los sonidos, los colores, los sabores, el
espacio, el tiempo… y, con todo ello, alimentas tu mente creando
una gran ilusión que, continuamente, se está realimentando
y ajustando a las nuevas realidades que va generando con cada nueva
combinación de experiencias.
Es la vida, tu
vida. Y esta es precisamente la maravilla. Esta capacidad de auto
crearte, de auto definirte, de ser diferente de los demás seres
vivos, de ser único.
Las mismas circunstancias
de esta naturaleza auto evolutiva, ha definido en ti dos conciencias
complementarias pero diferenciadas. Una es la encargada de sentir,
percibir y expresar a través de tus sentidos todos los datos
que te mantienen en continuo contacto con tu realidad. La otra, es
la que razona lo percibido e intenta explicar la naturaleza de dichas
percepciones.
Todo ello ha sido
englobado siempre dentro de una sola inteligencia en la que lo razonable
y verbalizable es lo que se ha tenido en cuenta y lo demás,
todo el amplio mundo de vivencias que no pueden transmitirse con palabras,
ha sido omitido o planteado como medios no fundamentales o situados
en un inconsciente que nadie sabe dónde se halla.
La Inteligencia
Sensológica llena este vacío al hacerse responsable
de todo lo concerniente a sensaciones y percepciones no verbalizables,
como son los sentimientos, el amor, el arte, la ternura o el odio
y las sensaciones de todos los pensamientos, acciones y percepciones
de tu vida.
Nunca deberías
encontrarte solo o deprimido por no saber explicar que está
pasando dentro de ti.
El desarrollo
de la Inteligencia Sensológica te permitirá analizar
tus sensaciones tal y como haces ahora con las palabras, entenderlas,
ponerlas en orden y vivir con más plenitud y menos ansiedad.
LO
QUE PIENSAS ES CONSECUENCIA DE LO QUE SIENTES
Lo que piensas
es, habitualmente, consecuencia de lo que sientes. Claro que puedes
pensar cosas sin sentirlas, de la misma manera que puedes inventarte
un personaje de ti mismo… Pero, de hacerlo, al querer ser alguien
que no eres, a la larga tu sentir auténtico aflora y te das
cuenta de que tu vida es una ruina porque el personaje que has construido
se ha convertido en un monstruo, y el estrés, la frustración
y el desamor se han fincado en tu vida.
Incluso, queriendo
ser sincero con tu vida, es muy difícil saber qué es
en verdad lo que sientes, lo que te hace único, lo que puede
hacerte feliz.
Muchas veces se
está tan condicionado por la idea de lo que debes ser que,
lo que simplemente eres, es un misterio y, tantas veces, un motivo
de enfrentamiento contigo mismo.
CONOCE
TUS SENSACIONES COMO CONOCES TUS PENSAMIENTOS
¿Qué
sucedería si pudieras conocer tus sensaciones tal y como conoces
tus pensamientos, si pudieras saber en cada momento qué es
en realidad lo que sientes y pudieras fijarlo en el tiempo para poder
contemplarlo una y otra vez y poder meditarlo.
Pues sucedería
que habrías adquirido la capacidad de leer las sensaciones
y procesarlas tal y como ahora haces con las palabras.
Del mismo modo
que el ser humano desarrolló un nuevo sistema de procesar la
información al descubrir las palabras, lo que le permitió
articular y transmitir conceptos, también ahora tú puedes
ampliar tu forma de procesar la información y dar un gran paso
en tu evolución personal al desarrollar tu Inteligencia Sensológica.
¿Cuál
será el cambio realizado?
Pues que en lugar
de trabajar solamente con la Inteligencia Verbal, trabajarás
también con la Inteligencia Sensológica, lo cual comportará
que dada la naturaleza holística y global de dicha Inteligencia
Sensológica, en lugar de procesar una información detrás
de la otra, podrás procesar múltiples informaciones
simultáneamente.
Al realizar las
experiencias que propongo, verás también que a medida
que se va desarrollando tu Inteligencia Sensológica, puedes
vivenciar varios espacios simultáneamente, así como
percibir varios tiempos a la vez. O sea, vivenciar secuencias completas
de espacio y de tiempo y hacer múltiples combinaciones con
ellas.
Descubrirás
que puedes acceder fácilmente a tu inconsciente y poner en
orden tus emociones.
Verás lo
fácil que es desimplicarte de un problema o un estado emocional
que te está obsesionando y desequilibrando.
Evidentemente,
este desarrollo sensológico le reportará a tu cerebro,
a tu mente y a tu inteligencia, una mayor eficacia y creatividad y
una mayor capacidad de analizar y analizarte en estratos profundos
de tu mente que hasta ahora te eran inaccesibles.
Como ves, está
en tu mano. La Inteligencia Sensológica esta ahí, en
ti, prácticamente virgen, y esperando que la desarrolles y
la utilices.
A medida que vayas
realizando las diferentes experiencias sensológicas que propongo
en mis cursos y mis libros, vas a ver como tu sensibilidad, tu inteligencia
y tu creatividad se va estimulando y desarrollando de forma armónica.
Descubrirás
una peculiaridad exclusiva del cerebro humano, su división
en dos hemisferios separados, que le ha conferido unas cualidades
que han permitido al ser humano, evolucionar y, en cierta forma, separarse
de los demás animales.
Irás afinando
las capacidades de tus cinco sentidos, que son esos maravillosos instrumentos,
sin los cuales estarías completamente aislado del mundo.
Experimentarás
también la relación que tienes contigo mismo en los
diversos aspectos de tu vida.
Entrarás
en el mundo fascinante de tu relación con los demás
y con el entorno.
En suma, desarrollar
tu Inteligencia Sensológica, te permitirá trabajar prácticamente
con la totalidad de tu cerebro.
Pero debes pensar
siempre, que el cerebro es un órgano que tú debes alimentar,
programar y preparar para que sea capaz de asimilar los conocimientos
que te lleguen del exterior y de ti mismo.
He desarrollado
la Sensología, con la intención de que tú encuentres
en ella la ayuda que necesitas para poder mejorar tu calidad de vida
en lo referente a aprender a percibir, expresar, organizar y utilizar
mejor tu complejo mundo no verbal, que tanto tiene que ver con tu
inteligencia, tu creatividad y tu equilibrio emocional.